El Camaleón que Quería Ser Más

En un bosque lleno de vida, vivía un pequeño camaleón llamado Camilo. Pero Camilo tenía un problema: no sabía quién quería ser.

Cada día intentaba ser alguien diferente. Un día imitaba a la liebre e intentaba correr rápido. Otro día trataba de rugir como el oso. Otro día se paraba sobre una rama, serio y silencioso, como si fuera el sabio búho Don Ulises.

Las ranas del lago lo miraban y se reían:
—¡Miren a Camilo! ¡No sabe quién es!

Camilo se sintió confundido. No entendía por qué cambiar tanto no lo hacía feliz. Así que decidió visitar a Don Ulises, el búho más sabio del bosque.

—No sé quién soy —dijo Camilo con tristeza—. Quiero ser rápido, fuerte y sabio, pero no sé qué elegir.

Don Ulises lo miró con calma y le dijo:
—No tienes que elegir ser otro. Solo tienes que decidir quién TÚ quieres ser.

Camilo no entendió.

—Pero… si no elijo ser como alguien más, ¿cómo sé qué debo hacer?

Don Ulises sonrió.
—Mira dentro de ti. ¿Qué cosas te hacen feliz? ¿Cómo quieres tratar a los demás? ¿Qué cosas disfrutas hacer? Cuando lo sepas, simplemente actúa en consecuencia.

Camilo pensó en esto mientras caminaba de vuelta a casa. Se dio cuenta de que le gustaba explorar el bosque, ayudar a sus amigos y aprender cosas nuevas. Así que, en lugar de intentar ser otro animal, decidió ser un camaleón valiente, amable y curioso.

Desde ese día, Camilo dejó de tratar de imitar a los demás y comenzó a actuar de acuerdo con lo que realmente quería ser. Y así, por primera vez, se sintió verdaderamente feliz.

Preguntas para Reflexionar

1. ¿Por qué crees que Camilo no se sentía feliz cuando intentaba ser como otros animales?

2. ¿Cómo crees que podrías empezar a ser la mejor versión de ti mismo?

3. ¿Qué cualidades te gustaría desarrollar en tu vida?

¿Quién Quieres Ser?

Cada persona en el mundo es única, con talentos, pensamientos y sueños diferentes. Pero hay algo que todos compartimos: el poder de decidir quién queremos ser. No se trata solo de lo que hacemos, sino de cómo elegimos actuar y qué valores queremos seguir.

Desde pequeños, los niños empiezan a definir su identidad. Observan a su alrededor y aprenden de lo que ven. Algunos quieren ser valientes como sus héroes favoritos, otros desean ser sabios, fuertes o generosos. Pero muchas veces surge la duda: “¿Cómo sé quién soy realmente?”

La respuesta es sencilla: cada día, con cada decisión, elegimos quién queremos ser.

Todos Podemos Elegir Quién Queremos Ser

Hay cosas que no podemos cambiar, como nuestra altura o el color de nuestros ojos, pero hay algo mucho más importante que sí podemos decidir: cómo actuamos y cómo tratamos a los demás.

Dile a tus hijos:

• "Si hoy decides ser amable, entonces estás siendo una persona amable."

• "Si decides esforzarte, entonces eres una persona que nunca se rinde."

Cada día es una nueva oportunidad para elegir. Podemos decidir ser generosos, valientes, creativos o pacientes. No se trata de lo que ya somos, sino de lo que elegimos ser con nuestras acciones.

Los Héroes No Nacen, Se Hacen

A veces los niños piensan que las personas valientes, inteligentes o exitosas nacieron así, pero eso no es cierto. Nadie nace sabiendo todo ni siendo un héroe.

Por ejemplo:

• Un futbolista famoso no nació sabiendo jugar; entrenó todos los días hasta volverse increíble.

• Un gran escritor primero aprendió a escribir sus primeras palabras antes de crear historias maravillosas.

• Un inventor primero cometió muchos errores antes de descubrir algo asombroso.

Diles a tus hijos:

• "Si hoy decides esforzarte, estás dando el primer paso para ser la mejor versión de ti mismo."

El coraje, la amabilidad y el esfuerzo no son talentos con los que se nace, sino cualidades que cualquiera puede desarrollar si así lo elige.

Cada Decisión Nos Acerca a Lo Que Queremos Ser

Imagina que cada acción es como una piedra que colocamos en el camino. Si decides ayudar a alguien hoy, estás construyendo el camino para ser una persona generosa. Si practicas algo que quieres aprender, te estás acercando a ser alguien talentoso.

Dile a tus hijos:

• "Cada pequeño gesto importa. No necesitas cambiar de un día para otro; basta con que elijas una pequeña acción cada día que te acerque a lo que quieres ser."

Pueden hacer un ejercicio simple:

1. Preguntarles: “¿Qué tipo de persona quieres ser?”

2. Hacer una lista de pequeñas acciones diarias que los acerquen a esa versión de sí mismos.

No Importa lo que Digan los Demás

A veces, los niños se sienten inseguros porque alguien les dice que no pueden hacer algo o que deberían ser de cierta manera. Pero nadie más puede decidir quién eres, solo tú.

Explícales que lo que realmente importa es cómo se sienten con sus propias decisiones.

Ejemplo:

• Si alguien dice "No puedes ser bueno en los deportes", pero tú practicas todos los días y disfrutas el proceso, entonces ya estás siendo la persona que quieres ser.

Diles:

• "Escucha tu corazón. Si algo te hace feliz y te acerca a la mejor versión de ti, sigue adelante sin importar lo que otros digan."

El Poder de Imaginar Tu Mejor Versión

A los niños les encanta imaginar, y esta puede ser una herramienta poderosa para ayudarlos a definir quién quieren ser.

Pídeles que cierren los ojos y se imaginen dentro de unos años:

• ¿Cómo les gustaría ser?

• ¿Qué cosas harían cada día?

• ¿Cómo tratarían a los demás?

• ¿Cómo se sentirían con ellos mismos?

Luego diles:

• "Si puedes imaginarlo, puedes trabajarlo. Solo necesitas elegir cada día acciones que te acerquen a esa persona que sueñas ser."

Conclusión: Eres lo que Decides Ser

Cada niño tiene dentro de sí un poder enorme: el poder de elegir. No se trata de lo que ya saben o tienen, sino de cómo deciden actuar cada día.

Diles:

• "Si quieres ser alguien valiente, sé valiente en lo que haces hoy."

• "Si quieres ser generoso, actúa con generosidad."

Cada día, con cada decisión, se están convirtiendo en la mejor versión de sí mismos.

TrIstÁn